“Promover y defender la vida para un futuro compartido como país” es el título del mensaje del Comité Permanente de los Obispos católicos de Chile en el que lamentan profundamente las iniciativas que atentan contra el valor sagrado de la vida humana, agregando que no se puede bajo ninguna circunstancia eliminar la propia vida o la de los demás bajo el peso del sufrimiento: “La vida es un derecho, no la muerte, que debe ser acogida, no suministrada”.