Francisca Donoso: “En agosto del año 2000, 26 integrantes del Movimiento Manquehue participaron del encuentro mundial de jóvenes en Roma, iluminados con el lema “Y la Palabra se hizo carne, y puso su Morada entre nosotros” (Jn 1, 14). En agosto, pero veinte años después, estos ya no tan jóvenes, nos juntamos a celebrar el paso de Dios por nuestras vidas, y a recordar lo que había significado esta peregrinación para cada uno de nosotros. Durante más de dos semanas y diariamente, se mandó a cada uno de los participantes la bitácora del viaje, para poder ponernos “a tono” para el día de nuestro encuentro virtual. Muchos fueron los recuerdos que volvieron a nuestra memoria, y eso nos llenó de alegrías. El día 20 de agosto, fue nuestro encuentro virtual, donde participaron 20 de los 26 jóvenes, tuvimos una instancia de lectio, donde recordamos el lema de la jornada, luego un video donde pudimos ver el paso de los años y los lugares increíbles que visitamos y terminamos con una buena conversación donde nos pudimos poner al día. Impresionante fue ser testigo de que la Palabra y la lectio sigue siendo parte de la vida de todos y que Dios habla con poder a pesar que algunos se pueden haber sentido más lejanos durante estos 20 años. Este encuentro fue para muchos de nosotros, una verdadera manifestación de Dios y estamos agradecidos de la historia que Dios ha hecho con nosotros. Hoy creemos que nuestro espíritu no envejece!!!! Seguimos siendo jóvenes porque Dios nos revitaliza a diario, nos llena de su espíritu y amor”. Gracia Carvallo: “Celebramos los 20 años de la Jornada Mundial de Jóvenes Roma 2000. Nos juntamos por Zoom 22 de los 26 que fuimos a conversar, recordar, hacer lectio y ver un emotivo video de lo que fue esa gran celebración con el Papa Juan Pablo II en un año santo. Todos teníamos el recuerdo muy vivo de esa tremenda experiencia y se notó fuerte en los ecos y en la conversación final que duró largas horas junto a un gran aperitivo y vinito para celebrar. En esta oportunidad agradecimos la pandemia que nos permitió juntarnos de tantos lugares distintos y sentir que estábamos juntos”.