¿Quién fue san Ignacio de Antioquía?
Obispo de Antioquía desde el año 70 al 107, condenado a muerte por el Emperador debido a su inquebrantable fe y por negarse a la adoración de los ídolos paganos.
¿Por qué es uno de los patronos del Movimiento?
Porque exhorta a renovarse en su celo por la comunión eclesial, a reconocer a Cristo en el obispo local, para buscar la unidad y la fidelidad con él, de mente y de corazón, desde el carisma que Dios les ha regalado. Enseña a vivir la Eucaristía dominical en las parroquias “uniéndose al obispo como cabeza y pastor de la Iglesia local y punto visible de comunión con la Iglesia Universal”. El testimonio de su fe vivida hasta el martirio muestra un camino por donde avanzar, la propia vocación a morir con Cristo todos los días para resucitar con Él a una vida eterna.